Demasiado estrés, otra semana de locos, empieza a ser demasiado habitual. Conduzco deprisa, música muy alta, no quiero pararme. Sé que si me paro empezaré a pensar. Y sé que cuando estoy así pensar no es bueno. Lo mejor es no dejar que los sentidos se relajen. De pronto, entre Fighter y Zapatillas se me cuela esto:
Mierda...
Mierda...
No hay comentarios:
Publicar un comentario